La madre de la víctima pidió justicia. Los acusados fueron imputados como coautores del crimen, que según las pericias ocurrió por estrangulamiento.
La madre de Rubén Atilio Stubbia, el carpintero asesinado en una casa del barrio Canciller en Maipú, expresó su profundo dolor tras la imputación de los dos sospechosos por el crimen y exigió justicia. La mujer, quien pidió ser querellante en la causa, aseguró que su familia está devastada por la tragedia.
La imputación de los dos sospechosos, en calidad de coautores del crimen, prevé penas de entre 8 y 25 años de prisión.
“Nuestra familia está muy dolida, está destruida por lo acontecido. Es injusto el maltrato que recibió mi hijo. Necesito como madre que los asesinos paguen por lo que hicieron.”
El asesinato, según determinaron los peritajes forenses, ocurrió por estrangulamiento, y los detenidos quedaron comprometidos con la evidencia, ya que fueron capturados en la escena del crimen. La fiscal Claudia Ríos recibió el respaldo de la familia por su desempeño en la investigación, en un caso que aún busca esclarecer detalles clave.
La madre, visiblemente afectada, dijo no conocer a los sospechosos y expresó su incertidumbre sobre los motivos del crimen: “Quiero saber toda la verdad. ¿Qué hicieron con mi hijo? ¿Por qué lo hicieron así?” Su relato reflejó el dolor de una familia destrozada por una pérdida que nunca imaginaron.
“Era una relación normal de familia. Almorzábamos juntos, cenábamos juntos, tomábamos mate cuando llegaba del trabajo. Siento que es injusto lo que le hicieron a mi hijo.”
El proceso judicial sigue en marcha y los investigadores continúan reuniendo pruebas para determinar con precisión la mecánica del crimen. Mientras tanto, los allegados a la víctima exigen que la justicia actúe con firmeza.
“Quiero que la justicia lleve mano dura. Quiero saber la verdad, saber qué hicieron con mi hijo. Quiero que Dios los juzgue. Dolor, mucho dolor como madre, porque uno cuida a sus hijos con tanto amor y cariño. Estamos mal, destrozados, nunca lo esperábamos.”