La Justicia confirmó la prisión preventiva para el joven imputado por tentativa de femicidio en Tunuyán. La víctima, de 18 años, perdió el embarazo tras la brutal agresión.
A casi tres semanas del brutal ataque ocurrido en el departamento de Tunuyán, donde una joven de 18 años fue víctima de un intento de femicidio, la Justicia mendocina resolvió este jueves mantener detenido a Agustín Espósito Vélez, de 24 años, principal acusado del hecho.
El imputado continuará alojado en el penal de San Felipe, mientras avanza la investigación. La fiscalía sostiene una acusación por tentativa de femicidio, privación ilegítima de la libertad, aborto sin consentimiento, lesiones agravadas y amenazas. De ser hallado culpable, podría enfrentar una pena de hasta 15 años de prisión.
El hecho tuvo lugar a comienzos de junio, cuando la joven, que cursaba un embarazo de tres meses, fue golpeada salvajemente por su entonces pareja en el domicilio que compartían con los padres del acusado. La víctima terminó con más de 20 lesiones, permaneció internada 17 días en el hospital Scaravelli y, como consecuencia de la agresión, perdió el embarazo.
La calificación legal de la causa se fue agravando con el correr de los días, a medida que avanzaban las pericias y los testimonios. La fiscalía, a cargo de Jorge Quiroga, sostiene que existen pruebas contundentes para sostener que se trató de un intento de homicidio agravado por el vínculo.
El agresor pidió prisión domiciliaria
En las últimas horas, los abogados defensores de Espósito, Facundo Mendoza y Diego Fernández Rossi, solicitaron que su cliente acceda a la prisión domiciliaria, alegando que fue víctima de agresiones y un intento de abuso sexual dentro de la comisaría donde estuvo alojado, lo que habría derivado en un intento de suicidio.
Este pedido será evaluado por la jueza en la próxima audiencia, donde también se definirá si el acusado continuará en el sistema penitenciario provincial o si se le concede el beneficio de arresto domiciliario.
Tras recibir el alta médica, la joven regresó a vivir con su madre en el departamento de San Carlos. Sin embargo, este lunes sufrió una recaída y debió volver al hospital por fuertes dolores abdominales. Según informaron fuentes oficiales, su estado de salud actual es estable, aunque continúa en seguimiento médico y psicológico.
El caso de violencia de género en Tunuyán ha generado un fuerte repudio social y se espera que la causa sea elevada a juicio en las próximas semanas. La familia de la víctima, junto a su abogada, manifestó que buscarán la pena máxima posible y remarcaron la necesidad de que “se haga justicia para que ninguna mujer vuelva a pasar por esto”.