Fue considerado uno de los pueblos más bellos entre 54 de todo el Planeta. Se puede ingresar a la mina de oro y aún conserva su aspecto cultural.
Se acerca el fin de año y muchas familias se preguntan qué hacer en estas vacaciones. Con la inflación superior al 100%, los viajes al exterior o a destinos lejanos se vuelven inaccesibles para la mayoría. Sin embargo, hay opciones para disfrutar de unos días de descanso sin gastar demasiado.
Una de ellas es hacer visitas cortas a lugares cercanos de Mendoza.
Si viajas con hijos, puedes elegir alojamientos que tengan espacios verdes, juegos infantiles y piletas. También puedes visitar parques temáticos, reservas naturales y sitios históricos que les resulten interesantes y educativos. Si viajas sin hijos, puedes aprovechar para relajarte en spas, hacer deportes de aventura o degustar vinos.
En San Luis está La Carolina, uno de los pueblos más lindos del mundo que saliendo desde Vicente Zapata y Colón de Ciudad de Mendoza hay una demora de 4 horas.
La Carolina es un pueblo de aproximadamente 300 habitantes que se sitúa a 80 Km al Norte de la Ciudad de San Luis, sobre la base del Cerro Tomolasta, a 1600 metros sobre el nivel del mar. Tiene aire freso y está rodeado de hermosos arroyos, se halla el casco principal del pueblo. Las calles recientemente empedradas, así como las casas, revestidas también en piedra originaria, conservan aún el aspecto original del pueblo colonial.
El lugar es conocido por haber albergado grandes cantidades de oro, que a mediados del siglo pasado fue casi agotado por grupos de mineros de varios lugares del mundo. No obstante, la historia del oro de La Carolina sobrevive entre los nostálgicos pirquineros, ya que cuando el río crece y arrastra, esperan pacientemente con la ilusión de descubrir una fuente de riqueza.
Uno de los más lindos del mundo
La Carolina fue galardonado como uno de los pueblos más lindos del mundo. Fue durante la 25º Asamblea General de la Organización Mundial del Turismo (OMT), que se desarrolló en la ciudad de Samarcanda, en Uzbekistán. Este año se seleccionaron 54 destinos de turismo rural de todo el mundo con activos culturales y naturales y la Carolina recibió una distinción.
“Este pueblo de altura y calles empedradas fue el epicentro de la fiebre del oro en Argentina durante los siglos XVIII y XIX, primero con los españoles, luego con los ingleses, quienes agotaron los recursos de sus montañas dejando un pasivo ambiental en la región”, detalló el secretario de Turismo de la provincia puntana, Luis Macagno.
