Luego de casi un mes sin atención traumatológica para afiliados de PAMI en Mendoza, tres clínicas privadas llegaron a un acuerdo con los médicos. Sin embargo, en cinco instituciones el servicio continúa suspendido y hay pacientes en situación crítica que aún esperan una solución.
Tras 28 días de conflicto, parte del sistema de atención traumatológica para afiliados de PAMI en Mendoza comenzó a normalizarse. En las últimas horas, tres clínicas privadas firmaron un acuerdo con los profesionales médicos, lo que permite retomar algunas consultas y cirugías programadas. Sin embargo, en otras cinco instituciones, el servicio sigue interrumpido y cientos de pacientes continúan a la espera de atención.
El conflicto se originó en noviembre de 2024, pero se profundizó en abril de este año, cuando más de 30 médicos renunciaron al servicio de traumatología de PAMI, reclamando mejoras en sus honorarios. El principal reclamo de los profesionales es que se les abone por prestación realizada y no mediante un pago fijo mensual, además de exigir que los pagos se canalicen a través de la Asociación Mendocina de Ortopedia y Traumatología (AMOT).
Clínicas con acuerdo y normalización del servicio
De las ocho clínicas que atienden pacientes de PAMI en Mendoza, solo tres lograron acordar nuevas condiciones laborales con los médicos: la Clínica Santa Clara, la Sociedad Española y la Clínica Santa Rosa. Estas instituciones decidieron asumir el costo de los honorarios y pagar bajo un esquema similar al utilizado por OSEP, al menos de forma provisoria.
Según confirmó el presidente de AMOT, Daniel Fraccaro, el acuerdo no tiene un plazo definido y permite retomar parcialmente el servicio. “Estas clínicas entendieron la urgencia y decidieron actuar”, expresó.
La situación sigue sin resolverse en otras cinco instituciones privadas de la provincia: la Clínica Santa María, el Hospital Privado, el Hospital Italiano, el Santa Isabel de Hungría y la Clínica de Luján. En estos centros, el servicio de traumatología para afiliados de PAMI continúa suspendido y las urgencias tampoco están siendo atendidas.
Esto afecta directamente a pacientes que necesitan intervenciones quirúrgicas urgentes, entre ellos adultos mayores con fracturas de cadera, casos de gangrena o riesgo de amputaciones. Según indicó el ministro de Salud provincial, Rodolfo Montero, al menos 15 pacientes deberían ser trasladados con urgencia al sistema público, aunque allí la disponibilidad de camas también es limitada.
Los traumatólogos insisten en que el conflicto no es nuevo y que vienen reclamando desde hace meses por remuneraciones justas. Además de exigir el pago por cada prestación, los médicos denuncian que en muchos casos las clínicas privadas demoran entre 30 y 60 días en abonar los honorarios, lo que vuelve insostenible su trabajo.
Desde la asociación que nuclea a las clínicas (Aclisa), aseguran que los profesionales exigen aumentos del 300% al 400%, una cifra que consideran inviable en el contexto actual.
Por su parte, Fraccaro remarcó que “el conflicto no es con PAMI, sino con las clínicas”, ya que el organismo nacional no ha respondido ni a nivel provincial ni nacional. Incluso, el titular de PAMI en Mendoza, David Litvinchuk, evitó presentarse ante la Comisión de Salud Pública provincial cuando fue convocado para dar explicaciones.