El proyecto contempla que las fuerzas municipales puedan utilizar armas no letales como pistolas Taser, gas pimienta, bastones, drones y canes entrenados. Qué pasa con los vigiladores privados.
El uso de pistolas Taser en Mendoza vuelve a estar en el centro del debate. El proyecto, impulsado por la ministra de Seguridad de la provincia, Mercedes Rus, busca ampliar el equipamiento de los cuerpos de seguridad municipales con armas no letales. La medida ya generó diversas posturas entre autoridades locales y provinciales, mientras la reglamentación avanza en la Legislatura.
La discusión sobre la implementación de armas no letales no es nueva en Mendoza. Cuando Rus era legisladora, ya había presentado un proyecto de ley para ampliar su uso en las fuerzas de seguridad. Ahora, como ministra, impulsa esta iniciativa que permitiría a los preventores municipales contar con pistolas Taser.
Hasta el momento, el único departamento que confirmó su adhesión y que adquirirá estas herramientas es la Ciudad de Mendoza. En cambio, otras localidades como Luján de Cuyo, Guaymallén y Las Heras manifestaron que esperarán a que se definan las reglamentaciones antes de tomar una decisión.
¿Qué dice el proyecto de ley?
El texto ingresó recientemente a la Legislatura provincial y se espera que su aprobación demore al menos dos meses. La normativa contempla que los preventores puedan portar y utilizar pistolas Taser, aunque aún deben definirse los protocolos específicos de su aplicación. Actualmente, estas armas solo están en manos de grupos especiales de la Policía de Mendoza, como el Grupo Especial de Seguridad (GES) y el Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS), bajo estrictos protocolos para situaciones críticas, como secuestros extorsivos.
La ministra Rus destacó que el programa de capacitación para el uso de estas armas ya está diseñado y se encuentra disponible. La formación estará a cargo de la Policía de Mendoza, que desde 2007 emplea este tipo de dispositivos y fue responsable de instruir a la Policía Federal en su manejo. En un principio, el intendente de la Ciudad de Mendoza, Ulpiano Suárez, había mencionado que la capacitación estaría a cargo de la fuerza federal, pero finalmente la provincia tomó la iniciativa.
¿Cuántas armas se adquirirán?
Si bien la licitación recién se abrió, se estima que el municipio de la Ciudad de Mendoza comprará entre 25 y 30 pistolas Taser para equipar a los preventores. Actualmente, esta fuerza cuenta con alrededor de 500 efectivos, entre agentes de tránsito y preventores, por lo que no todos dispondrán de este armamento.
Además de las pistolas Taser, el proyecto contempla la incorporación de otros dispositivos no letales, como gas pimienta, bastones, drones y canes entrenados. Estas herramientas buscan fortalecer la labor de los preventores en tareas de seguridad y prevención del delito.
Críticas y oposición
La propuesta generó un fuerte rechazo en algunos sectores políticos. Desde la oposición advierten que la seguridad es una competencia provincial y que los municipios no deberían asumir esta responsabilidad. Además, señalan que Mendoza enfrenta un preocupante aumento del delito y que el Gobierno provincial debería enfocarse en reforzar la prevención en lugar de delegar estas tareas en las comunas.
Según datos actualizados a octubre de 2024, la provincia lidera los índices de delitos contra la propiedad, está en el puesto 10 a nivel nacional en cantidad de homicidios por cada 100.000 habitantes y se ubica tercera en robos de automóviles. Para la oposición, estos números reflejan una crisis en materia de seguridad y ponen en duda la efectividad de la medida.
La incorporación de Taser en la seguridad privada
Paralelamente, el Gobierno de Mendoza también avanza en la reglamentación para permitir que los vigiladores privados puedan portar pistolas Taser. La ley 9578 ya fue promulgada y su reglamentación se está ultimando. La normativa establecerá qué empresas de seguridad podrán acceder a este armamento, qué tipo de capacitación deberán recibir los vigiladores y en qué circunstancias podrán utilizarlo.
Carlos Aldecoa, representante de la Cámara Argentina de Seguridad y experto en criminología, explicó que las pistolas Taser se consideran un “elemento de fuerza media” y que su función es inmovilizar temporalmente a una persona mediante una descarga eléctrica de bajo amperaje. Según detalló, en países como Estados Unidos los agentes de seguridad suelen portar tanto armas de fuego como Taser, permitiéndoles elegir la herramienta más adecuada para reducir amenazas sin riesgo letal.