La docente de 35 años, que había conocido al joven en la escuela, fue acusada de tres cargos y sentenciada a seis años y dos meses de prisión.
Una docente se acercó a uno de sus alumnos y tomó su celular durante un evento escolar. La mujer, casada y con tres hijos en edad escolar, devolvió el teléfono a su dueño unos segundos después tras haber averiguado su perfil de la red social Snapchat y comenzó con una historia que derivó en abuso.
Barber cumplía labores de maestra suplente en la Escuela Princes Risborough en Buckinghamshire. Al poco tiempo de ese momento, comenzó a darse un ida y vuelta de mensajes y fotografías que enviaba la docente a su alumno.
No conforme con eso, la mujer lo llenaba de mensajes con preguntas inapropiadas y le contaba, incluso, cuando se iba a bañar. Esto incluso llegó a afectarle en clases, donde la mujer le hacía clases al adolescente. “Cuando estemos en clase, vamos a ver si nos ponemos lo más calientes posible sin que los demás se enteren“.
El joven al ser descubierto, en primera instancia negó todo pero luego declaró: “Mentí porque ella me había dicho que podía estar embarazada de un hijo mío y entré en pánico. Les mentí a casi todos menos a mis amigos”.
