Actualmente, el humorista está con prisión domiciliaria y vive con su hermana. Tiene problemas de próstata y fue operado de la vista. Arriesga una pena de hasta 20 años de prisión.
En los próximos días, la Justicia de Mendoza debe definir el futuro judicial del humorista Cacho Garay en la causa por abuso sexual y privación ilegítima de la libertad en la que es investigado luego de que lo denunciara su expareja, Verónica Macías. Actualmente, está con prisión domiciliaria y vive con su hermana, pero arriesga una pena de hasta 20 años de prisión.
Este lunes se llevó a cabo una audiencia en la que la defensa solicitó el cese de la prisión preventiva, ya que lleva detenido más de un año y medio y no tiene condena firme. Sin embargo, la jueza Natacha Cabeza decidió postergar su decisión hasta el próximo jueves, tras pasar a un cuarto intermedio. La defensa justificó este planteo como necesario para garantizar la imparcialidad de la magistrada, quien deberá determinar si están concluidas las pericias requeridas.
La defensa de Cacho Garay también argumentó los problemas de salud que tiene el mendocino. Fue operado de un ojo hace un tiempo y tiene que ser operado del otro. Además, tiene problemas de próstata y el tratamiento podría extenderse debido a su gravedad. Según sus abogados, Garay vive con su hermana mientras continúa bajo monitoreo médico.
El próximo jueves a las 11 de la mañana, la fiscal Mónica Fernández Poblet se pronunciará ante la jueza Cabeza, con la posibilidad de solicitar la elevación a juicio de la causa. En caso de que esto ocurra, la defensa podría apelar, dejando en manos de la jueza la decisión final.