Hallaron a una mujer asesinada en una bañera: llevaba ahí más de un mes

Hallaron a una mujer asesinada en una bañera: llevaba ahí más de un mes

Antes de matarla, le robaron una fortuna. Sospechan que fue torturada. Mirá los descuidos que tuvo el presunto asesino, que guio a los investigadores hasta él.

Una mujer de 51 años fue hallada sin vida en la bañadera de su departamento, ubicado en Belgrano, Buenos Aires. Fue asesinada hace aproximadamente 30 días y por el crimen se detuvo a un exnovio de ella. Fue identificada como Laura Sanoner.

El padre de la víctima fatal, Edgardo Sanoner, de 84 años, se preocupó porque no tenía noticias de su hija desde varias semanas, por eso decidió ir con un cerrajero y la Policía hasta la vivienda de la mujer, ubicada en la calle 11 de Septiembre al 2600. 

Apenas abrieron la puerta sintieron un impresionante olor nauseabundo. Se dirigieron al baño y encontraron el cuerpo sin vida de Laura, con la cabeza cubierta con una sábana y una media en la boca. El cadáver fue enviado a la morgue y la autopsia determinó que llevaba aproximadamente 34 días muerta y que había sufrido una asfixia mecánica por sofocación. 

Antes de ser asesinada, la mujer fue víctima de un millonario robo y se cree que de tortura. 

El principal sospechoso del femicidio es un ex novio de la mujer, identificado como Diego Arener, quien ya fue detenido y procesado con prisión preventiva.

Tenía que estar preso 

Arener había sido condenado a 20 años de cárcel en Santa Fe por el asesinato de un remisero y la pena se cumplía en agosto de 2018. Sin embargo, estaba prófugo desde 2013 porque no había vuelto en una salida transitoria y en 2016 asaltó a Sanoner. 

En aquella oportunidad, ella lo denunció por haberle robado dinero y pertenencias. 

En diciembre 2021, Arener había sido recapturado para que terminara de cumplir su condena, pero se había vuelto a fugar durante otra salida transitoria. 

Las pistas que complican al sospechoso

El mismo día que se cree que ocurrió el crimen, Arener se compró una moto y a los pocos días un auto que uso a nombre de su actual pareja.

Además, sus huellas dactilares quedaron impresas en un vaso, una lata y las sábanas que la víctima tenía en el rostro.