“El mundo necesitaba un Papa como Francisco y lo tuvo. Quizás este sea el primer paso para que todos entendamos que el Evangelio es hoy”, dijo un seminarista del Vaticano.
Miles de fieles despiden en la Plaza de San Pedro al Papa Francisco, en medio de un profundo dolor. Entre ellos, Edgar Pineda Gómez un seminarista, describe el impacto que la muerte del pontífice genara en creyentes de todas las edades. “Me sorprendía ver tantos jóvenes con sus caras llenas de lágrimas, rezando como peregrinos para darle una última despedida al gran Papa Francisco, quien transformó la Iglesia y nos enseñó que es el camino por el cual la gracia de Dios llega a nosotros,” expresó.
Francisco, quien encabezó la Iglesia durante más de 12 años, dejó una profunda huella al impulsar una visión renovada basada en la cercanía y la justicia social. Su pontificado estuvo marcado por la constante referencia al Concilio Vaticano II, buscando una actualización de la Iglesia acorde a los tiempos actuales. “El mundo necesitaba un Papa como Francisco y lo tuvo. Quizás este sea el primer paso para que todos entendamos que el Evangelio es hoy, que la misión es hoy,” agregó Edgar.
La despedida del pontífice en Roma reunió a fieles de todos los rincones del mundo, incluidos peregrinos argentinos. En Mendoza, diversos grupos han manifestado su agradecimiento por la obra del Papa, quien siempre mantuvo una conexión especial con su país de origen.
Desde la Plaza San Pedro, los fieles han podido ver la histórica Basílica de San Pedro y el apartamento papal en los Palacios Apostólicos, espacio que Francisco decidió no ocupar. En su lugar, prefirió permanecer en Santa Marta, en convivencia con sacerdotes y trabajadores del Vaticano, una decisión que reflejaba su estilo de vida austero y humilde.