Se trata de la redada más letal en la historia de la ciudad, dirigida contra el grupo criminal Comando Vermelho, y generó una fuerte repercusión internacional y política.
Río de Janeiro vive horas de tensión y conmoción tras la operación policial más violenta de su historia. Más de 120 personas murieron, entre ellas cuatro policías, luego de un megaoperativo contra el Comando Vermelho, una de las organizaciones criminales más poderosas de Brasil.
El despliegue, que involucró a 2.500 agentes, se desarrolló el martes en el complejo de favelas Penha, donde se registraron tiroteos, explosiones y escenas de guerra. Los vecinos denunciaron una “masacre” y trasladaron más de 50 cuerpos a una plaza local, mientras que medios internacionales describieron el hecho como una tragedia sin precedentes.
Según las autoridades del estado de Río de Janeiro, el operativo tenía como objetivo frenar la expansión territorial del Comando Vermelho, responsable de tráfico de drogas, armas y transporte ilegal.
La acción derivó en intensos enfrentamientos que incluyeron granadas lanzadas desde drones, un hecho inédito en las operaciones urbanas brasileñas.
Hasta el momento, se registran 81 detenidos y 137 víctimas fatales, aunque el número podría aumentar, ya que decenas de cadáveres fueron hallados por vecinos en las horas posteriores al operativo. “Los cuerpos aparecían entre los escombros y las casas destruidas. La gente gritaba ‘asesinos, asesinos’ mientras buscaba a sus familiares desaparecidos”, relató un testigo a medios argentinos.
Repercusiones internacionales y cuestionamientos políticos
La magnitud de la violencia tuvo un fuerte impacto mediático global. Diarios como The New York Times, The Guardian y El País publicaron duras críticas al uso excesivo de la fuerza y pusieron en duda los vínculos políticos del gobernador Claudio Castro, aliado del expresidente Jair Bolsonaro.
Desde el gobierno estatal defendieron el operativo como parte de la lucha contra el narcotráfico, aunque organizaciones sociales y de derechos humanos denunciaron un accionar desmedido y alertaron sobre el alto número de víctimas civiles.
El hecho también generó una grieta política a nivel nacional. El ministro de Justicia, Ricardo Lewandowski, advirtió que si el gobernador de Río “no logra controlar el delito, debe pedir una intervención federal”.
“El combate al crimen debe basarse en inteligencia y coordinación, no en fuerza bruta”, afirmó el funcionario, comparando el caso con la Operación Carbono Oculto en São Paulo, donde se desarticuló una banda criminal sin víctimas fatales.
Qué es el Comando Vermelho
El Comando Vermelho, fundado en 1979 en una cárcel de Río, es una de las bandas más antiguas y violentas de Brasil. Solo es superado en poder por el Primer Comando de la Capital (PCC), con base en São Paulo.
El operativo se realizó pocos días antes de que Río de Janeiro reciba eventos internacionales relacionados con la Cumbre Climática COP30 y el Premio Earthshot del príncipe Guillermo del Reino Unido. En el pasado, la ciudad ha ejecutado acciones policiales masivas antes de grandes encuentros globales, como los Juegos Olímpicos 2016 o la Cumbre del G20 2024.